domingo, 11 de julio de 2010

Infiel


Ponerse colonia cara (la mas cara de la tienda), vestir elegantemente, cortarse las uñas, cortarse el pelo, cortarse los pelillos de la nariz y de las orejas, reservar una mesa discreta en un restaurante caro, lavar el coche, cambiarse de calzoncillos, lavarse los dientes, citar a Antonio Gala, decirle que esta guapísimo (aunque sea una mentira de tamaño descomunal), pagar discretamente la cuenta del restaurante y del hotel, cogerle de la mano e interesarse por sus sentimientos, decirle que lo volverás a llamar (aunque sea mentira).

3 comentarios:

  1. Siempre preocupados por ocupar un buen lugar dentro del mercado. Buen perfume, buena ropa, buen cuerpo, buen sexo, buena cultura, buena cena, buena cuenta bancaria, buena casa...siempre valorando el verbo tener mas que el verbo ser. Nos exigimos demasiado. Exigimos aun mas al resto del muno. Cuanto tiempo estaremos en el mercado? Cuando conseguiremos lo que buscamos? Dejariamos de buscar entonces? Cuándo decidiremos no entrar en ese juego de superficialidad?

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  2. Pues se supone que cuando encontramos a la "persona adecuada" dejamos de maquillarnos y "nos ponemos bragas cómodas"... Eso hasta que un día en el Energym o en el DÍA nos encontramos con un Adonis o Afrodita que nos hace cambiar los esquemas y traicionar lo que "en principio" más queríamos... Y vuelta a comprar perfumes... De ahí el título de la foto ;)

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  3. Estamos todos bastante inmersos en todo esto. A la deriva. Y eso que aún estamos en pleno esplendor.

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